preocupa a la Unesco
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Con la finalidad de constatar el estado de conservación de los bienes inscritos es la Lista del Patrimonio Mundial, periódicamente la Unesco hace visitas a los diferentes países donde se encuentran estos monumentos. Entre el 20 y 22 de de febrero de este año estuvo en Trujillo una misión supervisora, que luego emitió un informe con recomendaciones de urgente atención por parte de las autoridades.
Este documento sugiere que haya una plena y sistemática aplicación del Plan de Manejo y Gestión elaborado en 1999, garantizando la sostenibilidad con los recursos económicos necesarios. Esto implica que los responsables del monumento respeten esos lineamientos, fortaleciendo las capacidades institucionales. Este Plan debe ser ampliamente difundido entre los grupos de interés a fin de que sus contenidos sean conocidos y se concrete el apoyo público y privado en su aplicación. Estos esfuerzos deben estar vinculadas a los planes de desarrollo territorial propuestos por el Gobierno Regional.
Lamenta que los trabajos que se realizan no son priorizados, porque se impulsan desde un punto de vista político. Y recomienda que el Estado aplique las leyes y normas pertinentes para terminar con las ocupaciones ilegales del área intangible, reubicando a los invasores.
Urge la necesidad de establecer la delimitación física de Chan Chan con barreras arbóreas, garantizando el apoyo de las familias circundantes, iniciando campañas de comunicación en aras de de incrementar la conciencia sobre la importancia de los sitios Patrimonio Mundial. Se sugiere coordinaciones estrechas con los municipios aledaños para evitar que se vierta basura en el área intangible.
“El sitio actualmente no se encuentra en buen estado. Varias acciones de conservación deben ponerse en marcha, incluyendo el control y la mitigación de los niveles de agua y la conservación de los muros perimetrales”, precisa.
Pese al importante trabajo orientado a mitigar el aumento de los niveles freáticos, aún es necesario continuar con las investigaciones para entender la hidrología en el sitio y los sistemas asociados con su comportamiento, de modo que haya una acción más dinámica, en vez de reacciones de emergencia.
Las investigaciones arqueológicas deben responder, en primer lugar, a las preocupaciones relacionadas con la conservación, y a lo previsto en el Plan de Gestión, dando un enfoque global a las excavaciones y conservación, de acuerdo a la disponibilidad de recursos.
La ejecución de los proyectos relacionados con la recuperación del medio ambiente, la reforestación, el uso productivo de los huachaques y totorales debe hacerse en alianza con otras instituciones.
Otras amenazas importantes lo constituyen los grandes proyectos de desarrollo y expansión urbana con dirección al sitio, pues las nuevas construcciones están muy cerca de los límites, al igual que una planta de alimentos de animales, que alteran el contexto arquitectónico y la integridad del paisaje. Por eso es primordial que los municipios regulen los nuevos permisos de construcciones en la zona de amortiguamiento.
Los diferentes accesos al monumento arqueológico constituyen otra seria preocupación, principalmente es la carretera Trujillo - Huanchaco que lo recorta en dos, lo que demanda la necesidad de priorizar las principales vías y bloquear, y de ser posible, cerrar la que conduce al aeropuerto y construir una de circunvalación, a fin de que el sitio recupere su integridad.
• DAÑOS PAULATINOS
Entre los daños más visibles resaltan la pérdida de las capas originales o de componentes decorativos restaurados, al igual que las paredes de las lagunas, a causa de la salinización, los excrementos de aves, microorganismos, pulverización de los materiales, el irracional pintado de paredes, la erosión y el huaqueo (excavaciones clandestinas).
La misma batería de servicios higiénicos del parador turístico, a pesar de proporcionar beneficios funcionales, también representa una fuente de contaminación, debido a las fugas en la tubería de agua.
Las nuevas excavaciones arqueológicas generan más problemas de conservación, en la medida que estos proyectos no forman parte del plan maestro, pues son producto del entusiasmo de los arqueólogos, por ello se recomienda aplazar estaos trabajos hasta que el sitio se halle estabilizado en todos sus componentes.
Los agricultores siguen utilizando los campos dentro del área intangible, una práctica que genera una secuela de problemas a la estabilidad de los restos arqueológicos, por la constante humedad que genera riego. El proyecto Chavimochic también influye en la elevación de la capa freática.
El arrojo de grandes cantidades de basura al interior del área protegida es una práctica común de la población local. La Misión observó camiones que arrojaban desechos en la zona intangible, sin aparente conocimiento de los valores del sitio.
Los expertos expresan su disconformidad con la posible construcción de otro museo en el área intangible, el mismo que tendría implicancias políticas, debido a que las nuevas edificaciones alteran la arquitectura antigua y contradicen el plan de gestión, ya que , por un lado, se demuelen casas invasoras, y por otro lado, el sector oficial se aprestar a levantar un enorme edificio dentro del sitio. Esto definitivamente envía un mensaje equivocado a la población local.
“En la práctica cotidiana hay una limitada capacidad para la toma de decisiones, lo cual pone de manifiesto la falta de experiencia en la conservación y una falta de voluntad para seguir el curso de acción definido en el plan de gestión”, enfatiza el documento.
LLAMADO DE ATENCIÓN
La colombiana, Graciela Esguerra Gouffry, experta en conservación, considera que estas recomendaciones son contundentes, especialmente en lo que respecta a la carretera a Huanchaco, debido a la contaminación y vibración causado por el paso de los vehículos que afectan a los muros.
A ello se suma la numerosa concurrencia de turistas, con más afluencia de vehículos. Los grupos visitantes contribuyen a la formación de un microclima a causa de la transpiración que entrar en contacto con el aire se impregna en las paredes, creando contracciones en los muros.
• HAY QUE EVITAR COLAPSO
El director regional del INC - La Libertad, Enrique Sánchez Maura, coincidió con las preocupaciones de la UNESCO y aseguró que este documento ya está en manos de la Unidad Ejecutora de Chan Chan, como responsable de poner en valor este monumento.
Agregó que, en coordinación con la administración de riego y el Ingemet, se elaboran estudios técnicos para reducir el nivel freático, mientras que la Unidad Ejecutora implementó el dren 13 a fin de que el agua de los cultivos discurra directamente al mar.
“En cuanto al cerco vivo, hemos conseguido 50 mil plantones donados por una empresa trujillana y que se le entregó a la Unidad Ejecutora, pero su implementación depende de que los planos sean aprobados en Lima”, comentó.
En tanto, la multiplicidad de los accesos es inevitable porque una parte del área intangible está invadida y los ocupantes tienen sus propios caminos, ahí sólo se espera que el Gobierno Nacional emita el reglamento de la Ley Chan Chan que permita tomar acciones específicas contra los invasores, algunos de los cuales acreditan su propiedad con títulos antiguos.
Mientras tanto, añade, no se puede cerrar las vías porque significaría enfrascarse en conflictos diarios, y una de las estrategias de su gestión es establecer alianzas con la gente circundante en aras de proteger los 14 kilómetros y medio de extensión.
“La construcción de una circunvalación en vez de la carretera Trujillo – Huanchaco es imposible porque no está dentro de las posibilidades del Gobierno Nacional ni de las autoridades locales. Chan Chan tiene que ser un todo indivisible, esa es una buena actitud, pero hasta que no tengamos soluciones definitivas no podemos cerrar esa vía”, aseveró Sánchez Maura.
Sin embargo, lamentó que la Unidad Ejecutora realice trabajos de investigación sin priorización alguna, por ello invocó que a su responsable que cambie su actitud a fin de que este monumento no colapse, más aún si se tiene en cuenta que esta semana llega Carolina Castellanos, una de las autoras de este informe.
VALOR UNIVERSAL
Chan Chan, la antigua capital del reino Chimú, es una de las mayores y más Importantes ciudades de la arquitectura de tierra prehispánica de las Américas. Sus conjuntos arquitectónicos y la complejidad de su diseño urbano reflejan la alta organización política, social, tecnológica, ideológica-cultural y económica.
Las paredes están decoradas con frisos y motivos antropomorfizados y zoomorfas que le dan esplendor a las grandes ruinas. Fue inscrito en la Lista del Patrimonio Mundial en 1986. Desde el momento de la inscripción, el Estado peruano ha puesto en marcha varias medidas para mitigar la decadencia es el lugar, incluido el desarrollo de un Plan de manejo, pero la insuficiencia de recursos y la discontinuidad es la ejecución han impedido el éxito de éstas.
El Comité recomendó que se adopten las medidas adecuadas para la conservación, restauración y gestión del lugar, que se ponga fin los trabajos de excavación a menos que estén acompañados de las medidas de conservación y que se adopten acciones de control contra el saqueo de las piezas. En 1999 se elaboró el Plan Maestro para la conservación y gestión.
Entre los expertos que conformaron el equipo de supervisión estuvieron Jim Williams (Unesco), Carolina Castellanos (Icomos) y Nelly Robles (ICCROM). Ellos sostuvieron reuniones con los alcalde de Trujillo y Huanchaco, así como con el Presidente Regionales, las autoridades de la Dirección regional de Turismo, Agricultura y el Proyecto especial Chavimochic, director del INC y el Jefe de la Unidad Ejecutora de Chan Chan.
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